La confianza de los consumidores dibuja señales en el firmamento que permiten esperar una recuperación en la demanda de las familias este año.
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC), que prepara Unimer para EF, cerró el año pasado en 5,2 puntos (de los 10 posibles), un nivel que no se observaba desde hace 20 meses.
A decir verdad, aunque por segundo año consecutivo el ánimo de las familias hacia la economía del país ha estado apagado, signos de revitalización surgieron en el último trimestre.
La confianza promedio del 2010 terminó en 4,5 puntos, esto quiere decir que a lo largo de 12 meses fueron más los pesimistas..
A pesar de las vacilaciones hubo un repunte de última hora en el ICC, de la mano de mejores expectativas en torno a variables como la estabilidad laboral y los ingresos familiares..
De hecho, el mayor repunte ocurrió del lado del Índice de Expectativas del Consumidor (IEC), que escaló a 6,4. El 56% de los hogares espera que 2010 sea mejor.
Tras 60 meses de observaciones, Valeria Lentini, directora de proyectos de Unimer, ratificó que existe una relación de causalidad entre el ICC y el consumo privado, que se manifiesta con un año de rezago.
Lo anterior permite proyectar que para el 2010 se manifestará una tendencia a la recuperación leve de esta variable, luego del estancamiento sufrido en el 2009.
El ICC lo calcula Unimer para EF, con base en una encuesta telefónica a una muestra de 400 hogares. En ella se plantean preguntas sobre la situación económica actual personal y del país, así como de las expectativas.
Lo que más golpea
Si se analizan con detenimiento las razones que alimentan el pesimismo en los jefes de hogar, se concluye que la inflación se sostiene como uno de los factores determinantes.
Empero, la tendencia ha sido que el aumento de los precios ceda terreno y en su lugar otros temores, como la carencia de empleo y la reducción de los ingresos, ganen peso.
Desde mediados del año pasado empezó a retroceder desde 54% hasta 41% la cantidad de hogares que manifestaba que su situación es peor ahora, que hace un año.
Dentro de esa ecuación las familias terminaron el año con expectativas de inflación menores, y aumentos de precios comedidos, comparados con el 2008.
Para Lentini, la expectativa de los consumidores en relación con el aumento de precios en los próximos 12 meses y la inflación anualizada tiene correlación.
Además, se concluye que los consumidores logran influir con sus expectativas en la inflación.
“Indudablemente, existen otros factores que contribuyen en el corto y largo plazo a explicar la dinámica de los precios, entre ellos el tipo de cambio, la liquidez de la economía y los precios de las materias primas”, recalcó.
A pesar de eso, la percepción de los consumidores contribuye de manera importante a explicar la dinámica de dichos precios.
Lo anterior sugiere que las bajas inflaciones de estos meses están provocando un cambio de expectativas, que contribuirá a mantener los precios estables.
Comercio y gobierno
La compra de bienes discrecionales –cuyo consumo se puede posponer–, como artículos grandes para el hogar, casas y vehículos, atraviesa por una mala racha. Aun así, en algunos casos hay síntomas de mejoría.
La variable que pone más escépticos a los jefes de hogar ante la compra de electrodomésticos es la insuficiencia de ingresos, que desde hace un año superó a quienes consideran el precio como el factor más crítico.
Similar comportamiento tiene la compra de carro y casa. En ambos casos el precio dejó de ser una de los aspectos clave, y en su lugar emergió el ingreso.
Liliana Aguilar, directora ejecutiva de la Asociación de Importadores de Vehículos y Maquinaria de Costa Rica (Aivema), recalcó que en el 2009 mermó la importación y venta de automotores.
Aun así, ven señales positivas en el flujo de crédito en los próximos meses, así que se espera una recuperación en el sector.
En cuanto a la construcción y la compra de vivienda, Jaime Molina, directivo de la Cámara de la Construcción, especificó que en las zonas costeras de Puntarenas y Guanacaste, la desaceleración fue enérgica, y permanecerá así por al menos tres años.
Por el contrario, en el Gran Área Metropolitana, la demanda de vivienda se mantendrá, aunque no en los niveles de antes. “San José volverá a dominar la construcción”, comentó.
La valoración de la labor del Gobierno también tuvo altos y bajos. A mediados del 2009 las calificaciones mejoraron, pero retornaron a terreno negativo.
Con base en la experiencia de hace cuatro años se sabe que el año electoral también pesa en el ánimo de los consumidores. Dependiendo de la decisión popular del próximo mes, el ICC podría ganar impulso, o retroceder.
Fuente: El Financiero