Encuesta Nacional Unimer – La Nación
- Abel Pacheco al frente de intenciones de voto con un 29,5%
•Segunda ronda de elecciones, una posibilidad fuerte
• Araya y Solís codo a codo por segundo lugar en preferencias
El respaldo al candidato presidencial del Partido Acción Ciudadana (PAC), Ottón Solís, creció en forma significativa desde octubre y ahora prácticamente iguala al liberacionista Rolando Araya.
Mientras, el aspirante socialcristiano, Abel Pacheco, continúa a la cabeza en las intenciones de voto, según la última encuesta que hizo la empresa Unimer Research International, por encargo deLa Nación.
Ante la pregunta: «Si las elecciones fueran hoy ¿por quién votaría usted?», el 29,5 por ciento de los electores responde que apoyaría a Pacheco, el 22 a Araya y el 21,6 al exdiputado Solís.
Según el mismo estudio, el 6,6 por ciento favorece al aspirante del Movimiento Libertario, Otto Guevara, y el 1,3 por ciento a otros candidatos. En el grupo de «otros», quien más respaldo obtuvo fue Justo Orozco, de Renovación Costarricense, con un 0,4 por ciento de las menciones.
Los indecisos representan el 8,2 por ciento de la muestra; el 6,5 por ciento, aunque acudiría a las urnas afirma que no votará por ninguno, el 4,1 dice que no sufragará y el 0,3 no sabe, no responde o votará en blanco o nulo.
Cuando los encuestadores preguntaron por la intención de voto, presentaron a los entrevistados una tarjeta que incluía a todos los candidatos presidenciales inscritos ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Aunque Pacheco encabeza las preferencias, en ningún escenario alcanza, todavía, el 40 por ciento de los votos válidos necesarios para asegurarse el triunfo el próximo 3 de febrero, por lo que surge la posibilidad de que haya una segunda ronda, el 3 de abril.
Para elaborar este estudio, Unimer entrevistó personalmente –en todo el país– a 2.412 adultos costarricenses entre el 24 de noviembre y el 4 de diciembre. El estudio tiene un margen de error de 2 puntos porcentuales.
Unimer encuestó al doble de gente (usualmente son 1.200) con el fin de reducir el margen de error de 2,8 a solo 2 puntos porcentuales y obtener así datos que sean más confiables.
Arriba y abajo
Al indagar sobre la intención de voto solo entre quienes aseguran estar absolutamente decididos a ir a votar (un 54 por ciento de la muestra), el 32,4 apoyaría a Pacheco si los comicios fueran hoy, el 27 por ciento a Araya, el 25,7 a Solís y el 5,8 por ciento al diputado Guevara.
El crecimiento de dos opciones emergentes ocurre a la vez que disminuyen los dos partidos tradicionales, pero Solís –economista que dejó al liberacionismo– es quien capta más electores.
En la anterior encuesta de Unimer, efectuada entre el 12 y el 20 de octubre, Solís obtuvo el 7,3 por ciento de las intenciones de voto y desde entonces creció 14,3 puntos porcentuales. Guevara –abogado, de 41 años– también aumentó, pero en una proporción mucho menor, al subir 1,3 puntos (5,3 en octubre).
Al tiempo que Solís incrementó su caudal, decreció el de los candidatos de los partidos Unidad Social Cristiana (PUSC) y Liberación Nacional (PLN): Pacheco perdió 5,1 puntos (34,6 en octubre) y Araya cayó 8,7 (30,7 por ciento).
Entre el anterior estudio de Unimer y el actual hubo diversos acontecimientos que impactaron sobre la campaña política y pueden haber influido en la decisión de los consultados(Información aparte en pág. 6-A).
A pesar de que Araya ha perdido terreno frente a Solís, el PLN sigue muy por encima del PAC en cuanto a filiación partidaria. Al preguntar a los entrevistados por cuál partido simpatiza, el 30 por ciento mencionó por igual al PUSC y al PLN, el 13,6 al PAC, el 4,3 al Movimiento Libertario y el 20,3 por ciento a ninguno.
¿Segunda ronda?
La otra gran pregunta, además de quién podría ganar las elecciones, es si el que obtenga la mayor votación alcanzará al menos el porcentaje mínimo para ganar la presidencia en febrero.
Si no, será necesario que los dos candidatos que obtengan más sufragios vayan a una nueva elección, dos meses después.
El cálculo de los votos válidos depende del porcentaje de abstencionismo, que históricamente ha rondado el 18 por ciento, pero que en las elecciones de 1998 se disparó al 30 por ciento.
Unimer efectuó la estimación con base en dos escenarios de abstencionismo: uno de 12 por ciento, y otro de 24,1 por ciento, y en ninguno el candidato a la cabeza –Pacheco– alcanzaría el 40 por ciento de los votos válidos, si las elecciones fueran hoy.
En el primer caso, Unimer restó de la muestra total a quienes dicen que no votarán, a los que afirman que no votarán por ninguno y al 0,6 por ciento que no responde.
A estos se les sumaría un pequeño porcentaje de los indecisos que al final decidiría no votar, con lo que suma el 12 por ciento.
Para Unimer este escenario de abstencionismo podría ser el más cercano a la realidad. Bajo tales condiciones, Pacheco obtendría entre el 34,3 y el 38,6 por ciento de los votos, Araya iría del 25,2 al 29,1 por ciento, mientras que Solís recibiría entre el 24,7 y el 28,6 por ciento de los votos.
En el escenario del 24,1 por ciento de abstencionismo se toma en cuenta el historial de voto de los encuestados en 1994 y 1998.
Si así ocurriera, Pacheco ganaría entre el 33,2 y el 37,8 por ciento de los sufragios, Araya recibiría entre el 26,4 y el 30,7 y Solís estaría en el rango de 24,3 a 28,5.
¿Y si hay segunda vuelta? De enfrentarse Pacheco con Araya ganaría el primero, pero si Solís logra quedar segundo el 3 de febrero podría vencer en la segunda elección a cualquiera de los otros dos rivales y se convertiría en presidente (vea gráficos).
¿Entusiasmo y decisión? Aunque faltan menos de dos meses para los comicios, solo el 54 por ciento de los entrevistados está totalmente decidido a ir a votar, lo que marca una disminución importante con respecto a octubre (64 por ciento). El 30 por ciento respondió que es posible que vaya a votar, mientras que el 8 dijo que definitivamente no irá.
Fuente: La Nación