Si se comparan las percepciones populares de medio período de los últimos cinco gobiernos, el de Óscar Arias logra establecer una nueva marca.
Arias llega a la mitad del camino con el mayor porcentaje de opiniones favorables (50%) y, a la vez, con el menor porcentaje de percepciones desfavorables (14%).
El mandatario que más se acercó a esas cifras a mediados de su gobierno fue el socialcristiano Rafael Ángel Calderón (1990-1994). Llegó con el 15% de las opiniones en contra y con el 38% a favor; pero ese porcentaje se quedó cortó con el 50% logrado por Óscar Arias.
El expresidente socialcristiano Abel Pacheco (2002-2006), quien disfrutó de altos niveles de aprobación en diversos momentos de su mandato, no logró acercarse a esas cifras.
A mitad de período, casi la tercera parte de las opiniones eran desfavorables (30%) y las favorables eran aún menos (28%).
Poco apoyo. La percepción sobre la labor del expresidente socialcristiano Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002) en el 2000 es la segunda más desfavorable de los últimos cinco gobiernos (35%), pero las opiniones favorables superaban las de Pacheco (30%).
El menos popular de los cinco fue el liberacionista José María Figueres (1994-1998), quien tenía prácticamente los mismos números de Arias, pero a la inversa: 50% de opiniones desfavorables y solo 13% favorables.
A la mitad de un gobierno, los ciudadanos forman sus opiniones haciendo una evaluación más concreta del cumplimiento de las promesas de campaña.
Otro aspecto que puede intervenir es la gestión del Estado como un todo, aunque no se puede atribuir a un solo gobernante, dijo el politólogo Rotsay Rosales (no se le consultó sobre la presente encuesta).
Fuente: La Nación, 25 de marzo 2008