Menos personas opinan mal sobre Calderón, Rodríguez y Figueres.
Carazo es el único exmandatario que perdió popularidad en el último año.
Los costarricenses suavizaron su opinión sobre los expresidentes socialcristianos Rafael Ángel Calderón y Miguel Ángel Rodríguez, así como sobre el liberacionista José María Figueres.
Aunque la diferencia entre las opiniones desfavorables y las favorables sobre los tres exmandatarios continúa siendo negativa, esta se redujo sustancialmente en el último año.
La diferencia se obtiene de restar el porcentaje de opiniones negativas al de opiniones positivas.
La imagen de los tres políticos cayó en el 2004, cuando La Nación dio a conocer los casos CCSS-Fischel e ICE-Alcatel. El primero involucró a Calderón y el segundo a Rodríguez y Figueres.
Hace un año, Calderón, quien gobernó entre 1990 y 1994, tenía una diferencia desfavorable de 65 puntos, pero hoy esta es de solo 11 puntos. Mientras que a finales del 2004 el porcentaje de opiniones favorables sobre el socialcristiano era 16%, hoy se elevó a 41%.
Quienes más se inclinan por una percepción favorable son los residentes de la Gran Área Metropolitana rural (50%), las personas de nivel socioeconómico bajo (46%) y los hombres (43%).
Opinan peor de Calderón las personas de nivel socioeconómico alto (70%) y con educación universitaria (66%).
Los datos provienen de la última encuesta de Unimer para La Nación , que se basa en entrevistas a 1.220 personas de todo el país entre el 8 y el 15 del presente mes. El estudio tiene un margen de error de 2,8 puntos porcentuales.
Otro salto. La imagen de Rodríguez, quien gobernó entre 1998 y el 2002, también dio un salto.
La diferencia entre opiniones favorables y desfavorables era de 71 puntos negativos en noviembre del 2004 y hoy se redujo a 25 puntos negativos.
Mientras que a finales del 2004 solo 13% de los ciudadanos tenía buen concepto de Rodríguez, hoy la cifra se triplicó a 36%.
De todos los expresidentes, Figueres, quien gobernó entre 1994 y 1998, es el que tiene la diferencia desfavorable más profunda, pero también logró cierto repunte.
Hace un año, la diferencia era de 65 puntos negativos y hoy se redujo a 35 puntos negativos.
En noviembre del 2004, apenas el 15% de la población tenía una buena imagen de él, pero hoy el porcentaje es el doble.
Opinan mejor del exmandatario la mitad de quienes votaron por el Movimiento Libertario y las personas mayores de 60 años.
Los populares. El más popular de los expresidentes es el liberacionista Luis Alberto Monge (1982-1986), cuya imagen tiene una diferencia favorable de 28 puntos (hace un año eran 21 puntos).
Lo tienen en buena estima 60 de cada 100 personas, similar a como ocurría en noviembre del 2004.
Monge es más popular entre las personas de nivel socioeconómico alto (75%), los simpatizantes del PAC y quienes votaron por Ottón Solís (60% en ambos casos).
Le sigue el socialcristiano Abel Pacheco (2002-2006), quien también mejoró su imagen. La diferencia favorable pasó de siete puntos hace un año a 18 en el presente.
El 57% de la gente opina bien de él (50% hace un año) y el 40% tiene una percepción desfavorable.
Quien perdió popularidad es el exmandatario Rodrigo Carazo (1978-1982). Mientras hace un año tenía una diferencia favorable de 14 puntos, hoy tiene una diferencia desfavorable de siete puntos.
En noviembre del 2004, el 53% de las personas opinaba bien de él, pero hoy esa cantidad se redujo a 42%. Además, la mitad de la población lo percibe desfavorablemente.
En popularidad presidencial, las opiniones de los costarricenses privilegian a Óscar Arias, quien tiene una diferencia favorable de 60 puntos. Casi 80 de cada 100 personas entrevistadas expresó una buena percepción sobre él.
Fuente: La Nación. 27 de marzo, 2008