El número de personas que no piensan votar en las elecciones nacionales del próximo domingo se resiste a disminuir.
La más reciente medición de Unimer para La Nación evidencia que la baja en el probable abstencionismo, en relación con la encuesta de hace una semana, es leve: 1,3 puntos porcentuales.
En este último estudio, el abstencionismo probable se redujo del 39,5% al 38,2% de personas inscritas en el padrón nacional. En febrero del 2002 la cifra fue del 31,1%.
Ese resultado evidencia que, de la consulta anterior (entre el 15 y el 23 de enero) a la actual (entre el 27 y el 31 de enero) hay de 30.000 a 50.000 personas más dispuestas a votar.
Para el próximo domingo hay 2.550.613 ciudadanos inscritos en el padrón con derecho al voto.
¿Cómo se divide? La encuestadora dividió a los consultados de acuerdo con el nivel de decisión de ir a votar, desde los totalmente decididos y que ya saben a cuál candidato van a apoyar, hasta los más duros, cuya decisión de no acudir a las urnas es irrevocable.
En esta encuesta ambos extremos muestran crecimiento. El número de votantes totalmente seguros subió de 38% al 39,6% y el de abstencionistas irrevocables pasó de 12,1% a 13,8% del padrón.
En ambas tendencias hay otros segmentos, también divididos por nivel de decisión.
Entre quienes no dan mayores señales de querer ir a votar hay un grupo, que se redujo.
Son los abstencionistas «casi seguros», que dicen que no van a votar, pero podrían cambiar de opinión. Bajaron del 20,1% al 17,5%.
Pero también se redujo el último segmento de posibles abstencionistas; quienes dicen que irían a votar pero anularían el voto o lo dejarían en blanco, quienes pasaron del 7,3% a 6,8%.
Esas reducciones se tradujeron en reacomodos en los otros dos grupos de votantes probables.
Por ejemplo, el segmento de quienes dicen que votarían y tienen cierta inclinación por algún candidato bajó del 9% del padrón al 8%, pero el grupo de quienes expresan algunas dudas de acudir a las urnas subió de 13,5% a 14,3%.
Precisamente, en ese reacomodo la encuestadora ve reflejado de nuevo el clima de volatilidad en la decisión de voto.
En poco tiempo esas capas de electores muestran variaciones que, aunque ligeras, representan un amplio número de votantes, pues son porcentajes de los 2.550.613 votantes potenciales.
Históricamente, alrededor de un 4% adicional del padrón engrosa la cifra de abstencionismo, pues son personas que por fuerza mayor no asisten a votar.
Fuente: La Nación